Finalmente llegó el día de canjear nuestro premio del Zinc Shower. Nuestro trabajo obtuvo la recompensa de poder montar nuestro stand en el MarketLab de Sónar+D 2014, así como pases Pro para todo el festival Sónar. En serio…estábamos como niños chicos con juguete nuevo.
El miércoles 11 de junio comenzamos el montaje de nuestro puesto. En este caso, los espacios eran amplios y lujosos. Pero -siempre hay un pero- a la hora de asignar la distribución de los puestos, nadie se paró a pensar que no era una excelente idea ponernos a nosotros junto a la gente de Berklee, los dos puestos que más «ruido» íbamos a hacer y, por si eso fuera poco, junto al escenario donde se desarrollarían las charlas y showcases del MarketLab. En serio, gente que distribuye a la gente en los espacios de los eventos, conviene mirarse un poco (un poco) el tipo de proyecto que estás ubicando.
Pero bueno, como todos somos gente cordial y educada, nos pusimos de acuerdo con los chicos del Berklee y con la gente de producción para ir turnándonos a la hora de «meter caña» al volumen, de modo que no nos molestáramos los unos a los otros. ¡Diálogo, amig@s, diálogo!
Aquí lo del montaje no tuvo mucho que ver con el Zinc Shower. El espacio estaba claro, los requerimientos de mesas y sillas se pedían a la gente de producción, de modo que sólo tuvimos que aposentar nuestras cosas y a empezar. Fácil, por una vez (bueno, tuvimos que buscarnos la vida un poco para encontrar una segunda mesa, pero ya os hemos hablado de nuestra capacidad de supervivencia, verdad? 😉
El jueves 12 abría sus puertas Sónar+D 2014 2014, en el marco del Sónar de Día . Nosotros fuimos presentando dos nuevos sets: por un lado, Remix the artist permitía hacer remezclas de varios artistas de Ninja Tune al estilo MooBeat, ya sabéis, sólo con el movimiento de los brazos. Sonaron temazos de Bonobo, Two Fingers, Congo Natty, Balkan Beat Box…¡Todos ellos versionados en vivo por la gente que se acercó a tocar MooBeat!
Os dejamos un vídeo de una chica que nos impresionó especialmente, ¡por lo rapidísimo que le cogió el tranquillo al instrumento y la sesión increíble que se marcó!
Por otro lado, también presentamos Paint your music, una experiencia sensorial que permite al usuario componer una pieza musical mientras pinta en un lienzo virtual cuyo punto de vista también controla con el poder de sus manos. Suena complicado, pero es más sencillo de disfrutar que de entender
Una de las actividades para Pros que más útiles nos parecieron fueron el Meet the expert, un encuentro de unos 10 minutos con un experto en algún segmento de mercado relacionado con el mundo de la música, audiovisual, programación, artes visuales, marketing o negocios. En estos preciados minutos podías hablarle de tu proyecto a alguien con mucha más trayectoria y bagaje que tú para que te diera su punto de vista y su opinión al respecto. Podemos decir que de estos encuentros sacamos ideas y contactos muy enriquecedores.
Además, como cada año, se celebró el Music Hack Day, un evento enmarcado en el Sónar en el cual unos cuantos frikis programadores se encierran 24 horas frente a la pantalla y salen con una aplicación (la mayoría de las veces loca y divertida). Y este año uno de los apartados de ese hackathon lo ganó unos queridos y adorables frikis amigos nuestros.
¡Felcidades a todos, muchachos!
Y ya para terminar, el sábado nos quedaba aún una última (gran) satisfacción: el primer concierto de Noko, grupo sacado adelante por Leo Aldrey en poquísimo tiempo y que tiene el honor de ser una de las pocas bandas cuyo primer show es en un evento de la talla del Festival Sónar. Fue un concierto técnicamente perfecto, repleto de riqueza musical, pleno, bello, sensible…Podría pasarme un rato largo soltando adjetivos halagadores, pero voy a ir cerrando para comentar que, además, en la primera canción Jon se encargó de tocar MooBeat para lanzar efectos y loops. El vivo ejemplo de que nuestro pequeño instrumento puede aportar un valor añadido muy potente a las actuaciones en directo. Podéis aquí ver el concierto en la azotea que se marcaron.
Y con esto terminamos esta crónica de lo que fue nuestro primer Sónar como acreditados Pro. Una experiencia única, maravillosa de la que hemos salido aún más fortalecidos 🙂
¡Seguimos en la brecha!